jueves, 30 de julio de 2009

CREADOR DEL CIELO Y LA TIERRA.





timoteo 4:12
Ninguno tenga en poco juventud, sino se ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.

romano 12:2
No os conforméis a este siglo, sino transforma os por medio de la renovacion de vuestro entendimiento, para que comprobeis cual sea la buena voluntad de DIOS, agradable y perfecta.

timoteo 2:22
Huye también de las pasiones juveniles; y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón limpio invocan al señor.

timoteo 2:4
Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a fin de agradar a aquel que lo tomo por soldado.
proverbios 23:17
No tenga tu ccorazónenvidia de los pecadores, antes persevera en el temor de Jehová todo el tiempo.

proverbios 3:32
Porque Jehová abomina al perverso; mas su comunión intima es con los justos.

lucas 8:15
Mas la que cayóen buena tierra, estos son los que con ccorazón bueno y recto retien en la palabra oida, y dan fruto con perseverancia.
lucas 6:37
No juzguéis y no seréis juzgados; no condenéis y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.
Cuentan que un alpinista, desesperado por conquistar una altísima montaña, inició su travesía después de años de preparación, pero quería la gloria sólo para él y subió sin compañeros.
Empezó la ascensión y se le fue haciendo tarde, y más tarde... y no se preparó para acampar... sino que decidió seguir subiendo, y oscureció.
La noche cayó con gran pesadez en la altura de la montaña; ya no se podía ver absolutamente nada. Todo era negro, ninguna visibilidad, y la luna y las estrellas estaban cubiertas por las nubes.
Escalando una pared, a sólo unos pocos metros de la cima, resbaló y se desplomó en el vacío a velocidad vertiginosa. El alpinista nada más podía ver veloces manchas oscuras... y la terrible sensación de ser succionado por la gravedad.
Seguía cayendo... y en esos angustiosos momentos, le pasaron por su mente todos los episodios buenos... y no tan buenos de su vida.
Pensaba en la cercanía de la muerte y, sin embargo, de repente, sintió el fortísimo tirón de la larga soga que lo amarraba a las clavijas clavadas en la roca de la montaña.
En ese momento de quietud, suspendido en el aire, no le ocurrió más que gritar:
¡¡¡ AYÚDAME DIOS MÍO!!!
De repente, una voz grave y profunda de los cielos le contestó: — ¿QUÉ QUIERES QUE HAGA?— Sálvame Dios mío.— ¿REALMENTE CREES QUE YO TE PUEDO SALVAR?— Por supuesto Señor.— BIEN, ENTONCES CORTA LA CUERDA.Hubo un momento de silencio; y el hombre se aferró más aún a la cuerda...
Cuenta el equipo de rescate, que al otro día encontraron a un alpinista colgando, muerto, congelado, agarradas sus manos fuertemente a la cuerda... A TAN SÓLO DOS METROS DEL SUELO.
¿Y tú? ... ¿qué tan aferrado estás a tu cuerda? ¿Te soltarías?
No debes decir ni pensar que Él te ha olvidado. Quizás tu lo has olvidado a él, y no te das cuenta que a tu lado solo hay unas huellas, las de él, porque te lleva en sus brazos para que tu... Descanses... recuerda... que Él te tiene siempre de su mano.
Confiemos en DIOS!!!

INFORMACION:
LA BIBLIA.